Gark no es un gato de verdad, es un Gato Falso. Es un pequeño alienígena azul con un disfraz de gato morado. Max es un gato de verdad: gordo, esponjoso, amarillo y constantemente mimado por su devota dueña Betty. Gark es enviado a entrenar a la ciudad y confunde a Max con una de las criaturas más valientes del universo: ¡un tigre! Gark no puede creer su suerte: piensa que Max puede enseñarle a ser un héroe, porque eso es lo que necesitará ser si va a cumplir la antigua profecía y salvar el universo. Max nunca antes había tenido a nadie que lo admirara, y menos aún al futuro salvador del universo, pero ha visto suficiente ciencia ficción en la televisión para saber que esto es un asunto serio. Aunque le encanta tener un alienígena tan devoto a su cuidado, el problema es que no sabe mucho sobre ser valiente. Los instintos aventureros de Gark obligan a Max a enfrentarse al mundo fuera del apartamento de Betty, donde viven, y, aunque a regañadientes, actuar como el tigre que Gark cree que es.