El presidente Reynolds y su esposa se ven sorprendidos en medio de la noche por informes impactantes de que su hija ha sido secuestrada en una discoteca de Nueva York. La situación escala rápidamente cuando, tras el brutal tiroteo de un testigo en televisión en directo, una unidad de Navy Seals, liderada por el Comandante Christopher Lowe, irrumpe en el aparcamiento donde retienen a Alice Reynolds.