Un día, Largo Winch no tenía nada, al día siguiente heredó 385 mil millones de dólares y el liderazgo de una de las empresas multinacionales más poderosas del mundo: Group W. También heredó muchos enemigos, en particular la Comisión Adriática, responsable de la muerte de su padre. Para ayudar a Largo en su lucha contra la Comisión y contra la junta directiva de Group W, que no están nada contentos de que esté decidido a erradicar la codicia y la corrupción que son práctica común en Group W, forma un equipo de asesores compuesto por su viejo amigo Simon Ovronnaz, Georgy Kerensky, un ex agente de la KGB experto en alta tecnología, la ex agente de la CIA Joy Arden y el consejero de su padre, John Sullivan. Largo también lucha con sus sentimientos hacia su padre, quien nunca lo reconoció.