En el crudo mundo del NYPD, nadie es más duro que el detective Robert Ironside. Es un policía intrépido que no se detendrá hasta que los culpables sean llevados ante la justicia. Él y su confiable equipo de especialistas, escogidos a dedo - Virgil, Holly y Teddy, así como su antiguo compañero Gary y su jefe, el detective Ed Rollins - harán lo que sea necesario para resolver los crímenes más difíciles y notorios de Nueva York. Como detective, los instintos de Ironside son insuperables, y quienes lo rodean tienen que estar alerta si quieren seguirle el paso, porque cuando su columna vertebral fue destrozada por una bala hace dos años, Ironside juró que nunca permitiría que una silla de ruedas lo detuviera.